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TDAH. ¿Epidemia o sobrediagnóstico?

  • Categoría de la entrada:Neuropsicologia

No son muchas las patologías que generan tanta polémica como lo hace el TDAH. ¿Existe o no existe? ¿Es una moda? ¿Está sobrediagnosticado o infradiagnosticado? ¿Qué prevalencia real tiene? ¿Quién tiene que diagnosticarlo? ¿Exactamente qué es el TDAH? Si mi hijo/a no se está quieto ni un segundo… ¿tiene TDAH? Medicación: ¿sí o no? ¿Qué medicación hay que no tenga efectos secundarios?…. 

Como dijo Jack el destripador… ¡Vayamos por partes!

¿Qué es el TDAH?

Como su propio nombre indica, es un trastorno que se caracteriza por un patrón persistente  de inatención y/o hiperactividad-impulsividad que interfiere en el funcionamiento o el desarrollo. El TDAH empieza en la infancia, antes de los 12 años según el DSM-5 y las manifestaciones deben estar presentes en más de un entorno (casa, escuela, trabajo…)

Diagnóstico TDAH. ¿Nos ponemos de acuerdo?

A lo largo de los años los criterios diagnósticos para TDAH han ido variando al modificarse los manuales. Esto ha contribuido a que no hubiera un consenso entre todos los profesionales.

Hoy en día se pueden seguir diferentes criterios diagnósticos, pero los más usados son el DSM-5 y el CIE-11. Al contrario de otras ediciones, ambos manuales presentan actualmente muchas similitudes en los criterios diagnósticos, lo que facilita mucho la labor a los profesionales.

Criterios TDAH según el DSM-5

¿Es suficiente este cuadro para poder diagnosticar TDAH? La respuesta es NO.

La evaluación del TDAH requiere de:

  •  entrevista clínica al paciente y familiares
  • informes de otros observadores como profesores
  • examen médico que descarte otros problemas (visión ,audición…)
  • evaluación de antecedentes médicos personales y familiares
  • evaluación neuropsicológica
  • además se debe evaluar posibles trastornos comórbidos

Prevalencia. ¿Están todos los que son? ¿Son todos los que están? 

Si bien es cierto que en los últimos años hemos conseguido homogeneizar un poco los criterios diagnósticos, el problema de la prevalencia sigue siendo materia pendiente. Ponerse de acuerdo en este aspecto no es fácil, cada estudio usa diferentes metodologías lo que conlleva a que no se puedan comparar ni dar una cifra real. 

Se estima que en España la prevalencia oscila entre el 3 y el 7%

En las últimas décadas hemos pasado de un infradiagnóstico a un sobrediagnóstico. Hay varias causas que pueden ser las responsables de este aumento de casos según los investigadores:

  • Mayor conocimiento del trastorno por los diferentes profesionales que hace que se detecte antes
  • Mejor coordinación entre dichos profesionales
  • La información que reciben los padres ha mejorado
  • La posibilidad de que los instrumentos de diagnóstico no sean totalmente eficaces y se etiqueten a niños que no lo son.

Y añadiría otra a esta lista que sería cuando el niño/a no cumple con todos los criterios diagnósticos pero aún así se le etiqueta como TDAH porque ese diagnóstico permite optar a becas y ayudas. No digo con esto que todos los casos sean así ni mucho menos, pero haberlos…haylos. (Alguno que otro informe he visto en el que la alumna tenía otro trastorno totalmente diferente pero el diagnóstico era de TDAH). Esto hace que no nos pongamos del todo de acuerdo con la prevalencia real.

Algunos estudios se preguntan si puede ser debido a cambios psicosociales de nuestra sociedad tecnológica actual.

Tal y como indica García Peñas, Domínguez Carral  y también Narbona:

“La proliferación de los modelos que favorecen refuerzos externos inmediatos (videojuegos, dibujos animados, televisión, Internet, publicidad, etc.), la sociedad de consumo y el cambio hacia una mentalidad materialista, presentan pocas oportunidades para favorecer y entrenar la atención sostenida, la cultura del esfuerzo, la demora de recompensa, el empleo de estrategias reflexivas y el desarrollo de un autocontrol mental eficaz.  El establecimiento de límites y modelos de conducta organizada suponen un importante esfuerzo educativo y requiere inversión de tiempo por parte de los padres, elemento que cada vez es más escaso en los países industrializados y que se encuentra además influenciado por el cambio de modelos de familia (familias uniparentales, padres divorciados, etc.)”

Consecuencias del sobrediagnóstico

El sobrediagnóstico trae consigo daños que hay que tener en cuenta:

  1. Los efectos físicos y tratamientos innecesarios (sobre todo en este caso que se usan fármacos con efectos secundarios)
  2. Los efectos psicológicos por el estigma de ser etiquetado como “enfermo”
  3. La carga económica tanto del tratamiento en sí como del costo que supone la realización de revisiones y pruebas innecesarias.

Tratamiento TDAH

Según el consenso del GEITDAH (Grupo de Especial Interés en el Trastorno por Déficit de Atención/Hiperactividad) debe elaborarse un plan terapéutico individualizado e interdisciplinar

El tratamiento más eficaz es la combinación de psicoterapia basada en pruebas y psicofármacos. Actualmente la terapia conductual o la cognitivo conductual es la que ha mostrado mayor grado de apoyo, y el tratamiento farmacológico de primera elección es el metilfenidato. 

Al menos una vez al año debe evaluarse la necesidad de continuar con el tratamiento.

Es muy importante para el menor que haya una buena comunicación entre todos los profesionales (pediatras, psicólogos, neuropsicólogos, profesores, etc) para que tanto su vida social como su rendimiento académico no se vean afectados. En muchas ocasiones al niño con TDAH se le tacha de problemático en la escuela y no le ofrecen alternativas educativas adecuadas a sus necesidades.

Como ejemplo de lo que supone el estigma de las etiquetas, quiero que veas este video sobre la historia personal de Xavier Alconero

 

 

Resumiendo…

El TDAH sí existe, aunque la prevalencia actual es difícil de calcular por los diferentes problemas que entraña este trastorno. Es posible que haya un sobrediagnóstico, pero también es posible que haya más personas diagnosticadas por que hay más información y se puede detectar más precozmente. No se ha establecido una relación casual entre los modos de vida y el TDAH pero podría ser factible que nuestro modelo actual de sociedad pueda estar contribuyendo a generar una mayor disfuncionalidad del TDAH.

Si tu hijo/a no para ni un momento no tiene por qué tener TDAH, los niños son niños necesitan moverse para aprender. No olvidemos que para que sea TDAH tiene que darse en varios ámbitos y no sólo en el colegio. Si crees que puede tenerlo lo mejor es que consultes con un profesional que te pueda asesorar. 

Aquí puedes ver la página web de tdh y tu con consejos para padres y madres y muchos más recursos sobre el TDAH.

También puedes ver la web de la federación española de asociaciones de ayuda al déficit de atención e hiperactividad


  • García Peñas JJ, Domínguez Carral J. ¿Existe un sobrediagnóstico del trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH)? Evid Pediatr. 2012;8:51.
  • Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales: DSM-5. Editorial medica panamericana, 2014.
  • Montañés-Rada F, Gastaminza- Pérez X, Catalá MA, Ruiz-Sanz F, Ruiz-Lázaro PM, Herreros-Rodríguez O, et al; Grupo de Especial Interés en el TDAH (GEITDAH). Consenso del GEITDAH sobre el trastorno por déficit de atención/hiperactividad. Rev Neurol 2010; 51: 633-7.
  • Narbona, J. (2001). Alta prevalencia del TDAH:¿ niños trastornados o sociedad maltrecha. Rev Neurol, 32(3), 229-231.
  • Peña, J. A., & Montiel-Nava, C. (2003). Trastorno por déficit de atención/hiperactividad:¿ mito o realidad. Rev Neurol, 36(2), 173-179.
  • Vasconcelos, A. F., Ramírez, M. M., & Mildestein, Y. P. (2018). Trastorno por déficit de atención con hiperactividad, algunas consideraciones en su diagnóstico y tratamiento. Acta Médica del Centro, 12(4).

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